El hallazgo realizado en Polonia tiene una cronología de entre los siglos XI y XIII
Los arqueólogos que investigaban estas tumbas megalíticas en la zona oriental de Polonia no contaban con encontrarse a unos ocupantes tan modernos. Las estructuras, delimitadas por grandes rocas y rellenadas con cantos rodados, contenían enterramientos cristianos plenomedievales, y además algunos de ellos acompañados de lujosas vestimentas. Parece que en este territorio históricamente fronterizo las costumbres precristianas se mantuvieron vivas por mucho tiempo.
Fecha de Publicación
18 de octubre de 2016
Fuentes de información digital utilizadas
Archaeology, Science in Poland
Fuente de las imágenes
Science in Poland
Palabras clave:
medieval, Plena Edad Media, Sasiny, Podlaskie, Polonia, tumbas megalíticas, cristianismo, vivenda
Bibliografía científica, publicación original
Diez tumbas megalíticas monumentales de hace cerca de mil años han sido desenterradas por un equipo arqueológico en Sasiny (Polonia). A pesar de sus similitudes con las tumbas neolíticas, su interior está ocupado por enterramientos cristianos, según ha explicado el arqueólogo Michał Dzik.
El cementerio de Sasiny se encuentra en el este de Polonia, en las tierras altas de Drohiczyn. En los siglos XI al XIII, cuando los muertos eran enterrados allí, la zona estuvo cambiando de manos repetidas veces, en unas ocasiones bajo el control de los príncipes Piastas, y en otras bajo el control de los príncipes Rus. Se trataba de una zona de frontera.
"Todos los miembros de la comunidad local fueron enterrados en este camposanto, tanto los ricos como los pobres, incluyendo a la élite. Los ritos funerarios eran iguales para todos. Cada uno de los fallecidos era colocado en una gran estructura funeraria, cuyos límites estaban marcados por grandes rocas", explica Dzik, director de las excavaciones y miembro del Instituto de Arqueología de la Universidad de Rzeszów.
Las tumbas examinadas por los arqueólogos tienen forma casi rectangular. El espacio rodeado por rocas, algunas de ellas de media tonelada de peso, fue rellenado con varias capas de cantos rodados, que cubrían los cadáveres, colocados en ataúdes de madera, o cubiertos con un sudario. Estas estructuras tienen unas dimensiones de unos 5 por 3,5 metros.
Según el doctor Dzik, el cementerio servía a la comunidad local y las inusuales tumbas son el resultado de la evolución de las costumbres locales de enterramiento. Según otras hipótesis, la forma de estas tumbas podría haber sido introducida en la zona por poblaciones procedentes de Mazovia, o por guerreros de origen escandinavo llegados a través de los Rus.
"Muchas de las tumbas que hemos descubierto estaban parcialmente destruidas, pero las investigaciones han resultado ser muy interesantes. Los enterramientos al interior de las tumbas no habían sido alterados", explica el doctor Dzik.
El cementerio es único porque muy pocos yacimientos similares han sobrevivido hasta nuestros tiempos. Esto se debe a que los habitantes de la región utilizaron las piedras como material de construcción.
"También resulta sorprendente que los cristianos fueran enterrados aquí, a pesar de que la forma de las tumbas pueda sugerir otra cosa, ya que los cementerios llanos con tumbas excavadas en el suelo dominaban la región de Wielkopolska o Malopolska en aquella época", dice Dzik.
Según el investigador, aunque en los siglo XI-XIII el cristianismo ya había sido introducido en la frontera entre Polonia y los Rus, muchas antiguas costumbres paganas se habrían mantenido. Una de ellas podría ser la forma de las tumbas.
"En la segunda mitad del siglo XI la cremación fue desapareciendo rápidamente. Al mismo tiempo, los túmulos con estructuras de piedra subterráneas dejaron de construirse. Creemos que la razón fue la serie de prohibiciones que llegaron con el cristianismo. En el mismo periodo las tumbas en recintos de piedra se volvieron populares, pero sin montículos funerarios", dice el arqueólogo.
Durante el estudio de los enterramientos, los arqueólogos descubrieron evidencias de costumbres de enterramiento de tiempos precristianos, como hogueras hechas en el interior de las tumbas antes de volverlas a rellenar, o fragmentos de vasijas rotas previamente colocados junto a los difuntos, posiblemente utilizados durante las ceremonias.
El doctor Dzik duda de la presencia de sacerdotes cristianos durante las ceremonias funerarias en necrópolis similares, lo que podría incluso contribuir al hecho de que las viejas costumbres siguieran practicándose.
Numerosos elementos de adorno descubiertos junto a los cuerpos captaron la atención de los arqueólogos, incluyendo docenas de cuentas de vidrio, anillos de oro, o colgantes con forma de crecientes con una cruz. Los objetos descubiertos indican que al menos algunos de los fallecidos fueron enterrados con ricas vestimentas, probablemente festivas.
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