Un hallazgo de hace 30 años con un final feliz
La espeleología, esa pulsión de los humanos de adentrarse en las simas más profundas y recónditas, de explorar los límites propios y los de la geología, ha acarreado en numerosas ocasiones importantes hallazgos arqueológicos. Es el caso del hallazgo de los restos de un oso cavernario en una cueva de Almería, aunque su historia es aún más especial. Además de ser los restos más meridionales de oso cavernario que se conocen en Europa, su hallazgo se produjo hace unos 30 años, aunque ha sido ahora cuando su descubridor, David Martínez, ha podido volver a la cavidad acompañado de un experto en el tema como es Bienvenido Martínez-Navarro, codirector en las excavaciones de Orce, que ha podido certificar la importancia del hallazgo.
Fecha de Publicación
6 de noviembre de 2016
Fuentes de información digital utilizadas
Diario de Almería
Fuente de las imágenes
Prehistoria Wiki
Palabras clave:
prehistoria, holoceno, oso cavernario, Felix, Sierra de Gádor, Almería, mascotas, destacados
Bibliografía científica, publicación original
David Martínez, vecino de Alhama de Almería, siempre sintió la llamada de la espeleología. Por eso, ya con 17 años hizo un cursillo para iniciarse en esta disciplina. Una vez había ya recorrido las cuevas de su entorno más inmediato, fue buscando a quienes pudiesen darle a conocer nuevas cavidades de su comarca.
Así fue como llegó a la localidad de Felix, donde un recolector de esparto les guió hasta la conocida como cueva del burro. David y sus compañeros se adentraron en ella, y al traspasar una gatera casi al final de la misma, dieron con unos huesos. Algunos de ellos se habían fragmentado por un desprendimiento interno en la cueva. Ellos, conscientes de que podría tratarse de un hallazgo importante, recogieron algunos huesos en una bolsa.
Por aquel entonces no existía Seprona ni ningún otro cuerpo al que acudir en estos casos, por lo que decidieron llevar las muestras recogidas al yacimiento de Los Millares. Allí recogieron los restos, pensando ya que podría tratarse de un oso cavernario, pero de aquellos huesos David y sus compañeros no volvieron a saber. Y ningún especialista acudió a examinar los huesos de la cueva.
Casi 30 años después, David tuvo la oportunidad de volver a la cueva de su hallazgo de juventud, en esta ocasión acompañado de todo un especialista como es Bienvenido Martínez-Navarro, perteneciente al IPHES, responsable de la dirección de paleontología y codirector de las excavaciones en el yacimiento paleontológico de Orce (Granada). "Fue una satisfacción ver los huesos después de tantos años. Saber que seguían allí...", afirma David.
Bienvenido ha podido certificar que los huesos hallados en la cima pertenecen a un plantígrado y que, pendiente de un estudio pormenorizado, datarían de hace aproximadamente 7.000 u 8.000 años.
Según se desprende del informe de Bienvenido Martínez-Navarro, el hallazgo adquiere una gran relevancia dado que hasta ahora no se habían hallado vestigios de la presencia de este plantígrado en una zona tan meridional de la península Ibérica. Se trata, por tanto, de los restos localizados más al sur de Europa.
Estos osos vivieron desde hace 250.000 años hasta hace unos 8.000 años, momento en que se extinguieron. Median más de tres metros de altura y pesaban más de 400 kilos. Vivian en cuevas donde hibernaban, de ahí que la mayoría de restos óseos hallados se encuentren fosilizados.
Las referencias históricas sobre los osos en la provincia están registradas en fuentes históricas, pero hasta ahora no ha existido la certeza mediante el hallazgo de restos. En la toponimia aparece en el Barranco del Oso y la Rambla del Oso en Albox, o el Barranco del Oso de Zurgena, pero en ninguna de estas localidades de la provincia se ha localizado ningún resto hasta el momento.
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