El estudio para mapar y poner en valor las galerías romanas de Carmona ha revelado una red que se extiende a lo largo de varios kilómetros
Se acaban de dar a conocer los primeros datos obtenidos gracias a la puesta en marcha de un proyecto conjunto entre el Ayuntamiento de Carmona (Sevilla) y la Asociación Andaluza de Exploraciones Subterráneas con el fin de documentar en detalle las galerías o "minas" subterráneas de la localidad. Aunque el trabajo aún va para largo, el equipo ha dado con una vasta red de captación y canalización de aguas que se extiende a lo largo de varios kilómetros y que tiene un origen claramente romano. El mapado detallado de las galerías es un primer paso hacia su conservación e inclusión en el Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico de Carmona.
Fecha de Publicación
12 de diciembre de 2016
Fuentes de información digital utilizadas
La Información, Sevilla Actualidad, El Correo de Andalucía
Fuente de las imágenes
Sevilla Actualidad
Palabras clave:
mundo clásico, romanos, Carmona, Sevilla, España, minería, galerías subterráneas, economía
Bibliografía científica, publicación original
El pasado verano conocíamos la noticia del inicio de un proyecto para explorar e inventariar las galerías romanas de Carmona que ya va proporcionando interesantes datos. Los trabajos han revelado la existencia de una red kilométrica de galerías subterráneas o "minas" que servían para captar y canalizar aguas subterráneas.
Las referencias a estos túneles se conocen desde antiguo, ya que aparecen mencionadas en distintos textos, pero este es el primer estudio integral para su mapado y datación, que ha puesto de manifiesto su indudable origen romano.
El acuerdo entre el Ayuntamiento de Carmona y la Asociación Andaluza de Exploraciones Subterráneas permitirá conocer detalladamente su trazado y abordar su conservación, incluyéndolas probablemente en el Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico de la milenaria localidad.
Los trabajos realizados hasta la fecha se han centrado en la conocida como Mina de San Antón, que discurre bajo las calles Real y San Antón, a unos 15 metros de profundidad. En ella se han documentado bellas formaciones geológicas como estalactitas, nidos de pisolitas o perlas de las cavernas, chimeneas de hadas, coladas y calcitas flotantes, formadas a lo largo de milenios de filtraciones de agua a través del terreno calizo.
En cuanto a la cronología romana de esta obra de ingeniería de gran alcance, ha quedado respaldada por el importante hallazgo de una estructura perfectamente conservada y construida en su totalidad con tégulas. Esta estructura corresponde a un refuerzo de la canalización en un tramo de la mina donde el terreno es de composición arcillosa y por tanto más inestable.
Los trabajos se prolongarán aún durante largo tiempo, dado que aún queda una parte importante del trazado de las minas por documentar.
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