El monumento actual se atribuye al emperador Trajano, y fue erigido en el siglo II d.C.
La arqueología tiene estas cosas. Puede que un monumento lleve 2.000 años a la vista y aún tenga secretos que revelar. El espectacular puente de Alcántara (Cáceres) tal y como lo conocemos fue erigido por orden del emperador Trajano en el siglo II d.C., como parte de una importante ruta de acceso a distintos recursos mineros. Pero un pormenorizado estudio basado enla arqueología de la arquitectura ha identificado en una de sus pilas evidencias claras de una construcción previa, que aún no ha podido ser datada. Un nuevo reto al que dar respuesta.
Fecha de Publicación
2 de marzo de 2017
Fuentes de información digital utilizadas
Dicyt, La Información, ABC
Fuente de las imágenes
ABC, Arqueología de la Arquitectura
Palabras clave:
mundo clásico, romanos, Alcántara, Cáceres, España, puente, ingeniería, construcción, Trajano, vivienda
Bibliografía científica, publicación original
Arqueología de la Arquitectura
El célebre puente romano erigido en el siglo II d.C. en la localidad cacereña de Alcántara ha sido objeto de un pormenorizado estudio de arqueología de la arquitectura. Además de identificarse elementos de distintas épocas, los investigadores se han encontrado con una pequeña sorpresa que había permanecido oculta casi 2.000 años.
El estado actual del puente le debe mucho a una intensa restauración de mediados del siglo XIX, pero el estudio desarrollado desde el CSIC ha logrado ir más allá, ofreciendo unos interesantes resultados. La base de una de las pilas del puente, apoyada sobre la margen izquierda del río, ha revelado los restos de una estructura anterior al puente que se contempla en la actualidad.
Se trata de apenas tres hiladas de sillares de granito, de una piedra diferente a la utilizada en el resto de la construcción, y cuya inclinación indica que eran el inicio del arranque de un gran arco.
En un principio, parece que la explicación más sencilla sería que hubiese un puente anterior en el lugar, de gran importancia por su relación con la minería de la comarca, y que quizá hubiese sido derribado por una riada. Pero los investigadores creen que en ese caso serían visibles gran cantidad de piedras reutilizadas en la construcción de la segunda obra. Esto ha llevado a pensar a los autores del estudio que este primer puente pudo no haber sido completado nunca.
"La segunda hipótesis, y la más probable", indica el investigador Antonio Pizzo, "sugiere que los restos hallados pertenecerían a un proyecto fallido que empezó ejecutándose y se suspendió por causas que desconocemos y que podrían relacionarse con la utilización de un modelo arquitectónico poco adecuado para las circunstancias geográficas del entorno".
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